El punto en los miles que nos enseñó el maestro ha sido sustituido por un espacio en blanco
Como la palabra ortografía, una herencia de los griegos formada por 'orto' y 'grafía', quiere decir la escritura correcta, a nadie extrañará que los números expresados en cifras tengan también una forma correcta de escribirlas; es decir, una ortografía para ellos solos. Si cada cual escribiera los números como le pareciera oportuno no habría modo de cuadrar las cuentas.
El Diccionario panhispánico de dudas, el DPD, hace que nos caigamos del guindo con el famoso punto que el maestro nos enseñó a poner detrás de las unidades de millar. Ya no se lleva. Ahora hay que dejar un espacio en blanco porque así lo han acordado las 24 Academias de la Lengua que limpian, fijan y dan esplendor a nuestro idioma español, desde Filipinas a todo el continente americano pasando por España.
Dice el DPD que al escribir números de más de cuatro cifras, se agruparán estas de tres en tres, empezando por la derecha, y separando los grupos por espacios en blanco: 8 327 451 (y no por puntos o comas, como dependiendo de las zonas, se hacía hasta ahora: 8.327.451; 8.327,451. Y añade que los números de cuatro cifras se escriben sin espacios de separación: 2458 y no 2 458. Pero sobre todo, en ningún caso deben repartirse en líneas diferentes las cifras que componen un número. O sea, que mientras las palabras sí se pueden partir siguiendo unas determinadas reglas, los números no se trocean y tienen que mantener todas sus cifras en la misma línea
Deberemos saber, y poner en práctica siempre, que nunca se escriben con puntos, comas ni blancos de separación, los números referidos a años, páginas, versos, portales de vías urbanas, códigos postales, apartados de correos, números de artículos legales, decretos o leyes. Año 2008, página 5123, código postal 50008, rúa del Percebe 1333.
Quienes manejen calculadoras electrónicas habrán notado que vienen de fábrica enseñadas, unas con un puntito y otras con una coma, para señalar los decimales. La coma es normativa internacional, y el puntito, una peculiaridad anglosajona que también se admite en algunos países americanos. Pero entre nosotros, europeos de pro, siempre una coma y nunca, aunque algunos lo hagan muy mal, un apóstrofo (erróneamente llamado 'apóstrofe' por algunos) que viene a ser como una coma en la cabeza de los números.
La escritura incorrecta de los números es una epidemia ignorada que se extiende de científicos a escritores.... , y si existen unas reglas comunes de escritura ¿Por qué no hacer uso de ellas?.
© 1997 - - La Güeb de Joaquín | |||||
Joaquín Medina Serrano
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